Se dice que en Chile, desde el año 1925 se comenzó a proteger el patrimonio de forma oficial, a través de la primera ley de Monumentos Nacionales, pero que en ese tiempo, solo contemplaba edificaciones monumentales, sin embargo, de ahí en adelante la ley se fue modificando y agregando sitios, localidades, barrios o poblaciones, de manera de cuidar el patrimonio de zonas rurales en una mirada más de territorio.
Hoy por hoy, existen evaluaciones medioambientales ligadas al área de arqueológica y hasta una superintendencia de medio ambiente. En ORBE, la encargada del área de Arqueología, Javiera Arriagada, lleva a cabo todas estas tareas, teniendo como eje principal la protección arqueológica y del patrimonio cultural de cada proyecto.
En primera instancia, indica “que en la prospección visual inicial, vemos si hay evidencias arqueológicas en superficie y también si hay sitios arqueológicos cercanos al área de un proyecto, lo más probable es tengamos que mitigar y rescatar el sitio, para no tener problemas”.
Pero que, desde esa instancia en adelante, tienen que estar en constante comunicación con el ente rector de este trabajo, que es el Consejo de Monumentos Nacionales, que tal como indican ellos en su misión, su objetivo principal es:
“Ejercer la protección y tuición del patrimonio cultural y natural de carácter monumental, velando por su identificación, protección oficial, supervisión, conservación y puesta en valor, potenciando su aporte a la identidad y al desarrollo humano.”
Sin embargo, Javiera esclarece una problemática que se viene dando con el organismo estatal, donde las demoras para los permisos de proyectos se están demorando más allá de tres meses, sumado a los procesos de rescate y derivación de material arqueológico a un museo, nos declara que podrían llegar hasta un plazo de dos a tres años, alargando mucho más los proyectos medioambientales.
“Actualmente hay muchos sitios para poder hacer un proyecto medioambiental o hacer una construcción, pero en el Consejo de Monumentos no les da el tiempo ni los profesionales para tomar todos los proyectos y analizarlos, y hay muchos que quedan en carpeta”
Sin embargo, Javiera se muestra optimista, al indicar que en ORBE “estamos cumpliendo con los plazos super bien, incluso cuando no hemos podido ejecutar algunos proyectos por diferentes motivos, nuestra preevaluación y las campañas de sondeo previo, ya estarán hechas para ingresarlo al Sistema de Evaluación Ambiental”.
Acciones de trabajo arqueológico
Por todo lo manifestado por Javiera, el área de arqueología es un lugar donde tanto cliente como los trabajadores deben saber y estar al tanto del lugar en el que se está haciendo una inspección arqueológica.
Es por eso mismo que como objetivo principal, el área ha dispuesto de generar charlas de inducción para todo el personal involucrado, como herramienta de enseñanza y monitoreo previo de cada proyecto.
“Tenemos como obligación hacer charlas de inducción arqueológica patrimonial a todo el personal que participe, donde se le pueda enseñar desde que es la Arqueología hasta que hacer cuando hay hallazgo arqueológico” indica Javiera.
Esto es debido a que en algunos casos “entre los materiales normales que encontramos, tenemos un hallazgo no previsto, que podría ser por ejemplo un cráneo, y ahí tenemos que activar un protocolo y paralizar la obra para cumplir con los procedimientos que explicamos justamente en las charlas” dice Javiera Arriagada, área del área de Arqueología de ORBE Consultores.
Desafíos
A pesar de los tiempos largos de trabajo, los grande equipos humanos que manejar en el área y los protocolos legales que cumplir de forma burocrática, Javiera se muestra entusiasta al declararnos que, para este año, le gustaría poder entrar a más proyectos de minería y generar una alianza con Metro de Santiago, y así poder agrandar su área.
“Queremos que el área de arqueología crezca, ya que mientras más proyectos tenemos, podemos tener más personas tituladas trabajando en el área, ya que solo los titulados pueden pedir permisos a Consejo de Monumentos Nacionales y no correr riesgos legales” Indica Javiera.
Ya que nos explica, que muchas veces una persona puede pedir cinco permisos al Consejo de Monumentos Nacionales, pero al tener más de dos bajo un mismo nombre, podría incurrir en un problema legal con multas monetarias.
Sin embargo, Arriagada nos declara que el gran desafío del año 2024 del área es poder dar un paso gigante hacia la digitalización.
“Este año, queremos encaminarnos a la digitalización de los registros arqueológicos, y dejar de a poco la información escrita en papel, ya que actualmente seguimos archivando las muestras arqueológicas en bolsas con etiqueta de papel y lápiz”.
Siendo una labor muy importante y de gran ayuda para el área, que busca usar nuevas tecnologías y formas de trabajo, pero sin dejar atrás la estructura clásica ya construida en la consultoría.

Héctor San Martin
Periodista